El Corpodrama es una investigación grupal, una metodología a través de la cual un grupo trabaja con grupos. Su objetivo es desarrollar los recursos creativos que hagan del grupo una obra de arte en el camino de una estética y una ética de la vida.
Esta investigación se inicia en el proceso grupal de un equipo coordinador, constituido por profesionales de disciplinas diferentes. En su origen es la Eutonía y la Multiplicación Dramática. En el devenir de la experiencia se van incluyendo otras disciplinas, mediante la participación de profesionales dispuestos a abrir sus esquemas conceptuales. El eje conductor del Corpodrama es lo múltiple, lo escénico, lo corporal, lo grupal y lo complejo.
El equipo se toma a sí mismo como objeto de estudio en el proceso grupal, transfunde marcos referenciales conceptuales y herramientas operativas e inventa una expresión abierta, en una tensión fértil entre seguirse transformándose y tomar una forma, territorializarse.
En el transfundirse disciplinariamente, cada profesional es afectado por crisis identitarias personales y profesionales, que surgen de una interrogación que la “otra” disciplina empuja en la propia. Y esto es la transdisciplina.
A diferencia de la interdisciplina, que implica una voluntad que ordena e integra conocimientos, que sintetiza y suma puntos de vista, la transdisciplina supone un estado de experimentación, de saber provisorio, que corre el riesgo de querer legitimarse e instituirse como superador de las disciplinas que lo gestaron, antes que bocetos que pueden ser agenciados hacia nuevas formas.
Una ética del profesional transdisciplinado hace que viva con malestar ciertos modos de hacer ciencia, que, en nombre del rigor metodológico, lo apartan de las manifestaciones de lo humano con las que él vibra. Se inquieta cuando se le exige identidad profesional o muerte, para no ser descalificado o echado del saber instituido. El profesional transdisciplinado es más fiel a la interrogación que a los principios de la propia disciplina. Inventa nombres para sus experimentos, con el deseo de abrir los conceptos para que todavía se note en ellos el latido de lo vivo. Es un profesional que sabe más lo que no, que lo que sí, que ya no puede soportar la simplificación sin sonrojarse y que está condenado dantescamente a una complejidad devoradora de lo que lo toca en su humano.
Objetivos.
El Corpodrama asienta sus bases en la transdisciplina, en un proceso a través del cual los integrantes del grupo coordinador y del grupo coordinado, por lo general, profesionales de lo grupal, cuyo conjunto constituye el grupo experimentador, participan de una práctica, que construye una puesta en escena con una estética diferente cada vez (operística, teatral, de danza espontánea, eventos deportivos, circenses) y metáforas para operar en la vida cotidiana y en la esfera profesional. Se investiga y se afina en el transcurso de esta práctica el repertorio de los ritmos corporales, los diapasones internos para las resonancias, los modos perceptivos y expresivos, la disposición y las calidades de movimiento para entrar y salir de la escena, atravesando entre el espacio de la observación y el espacio de la representación, que incluye los bordes y transiciones entre uno y otro.
Con esta metodología y a través de inventarios de sensaciones, de posturas corporales, de escenas, intenta gestar una actitud experimental proclive a la autoobservación y a la observación de conductas, de hábitos de pensar, de moverse, de sentir. Se busca desplegar el mundo sensible, el que estremece los cuerpos, hace tartamudear las certezas de los equilibrios y tonos consabidos, deconstruye tiempos y promueve contagios positivos hacia la producción de nuevas formas, de estares flexibles y heterogéneos.
En este territorio experimental se interrogan las culturas encarnadas por los integrantes del grupo experimentador, que no sólo hacen visibles las diferencias entre las singularidades, sino que crean diferencias que diversifican cada singularidad.
Durante la experiencia corpodramática la persona participa en ritmos grupales diversos y pasa por distintas tonicidades (hipertonos e hipotonos), corporalidades (musculares, óseas, epidérmicas) y estados de ánimo. Tal vez ritmos y cuerpos diversos tomen su cuerpo conocido de una manera nunca vivida previamente y esta persona sea estimulada a curiosear en ese ser extraño que emerge dentro de sí, a descubrir potenciales de vida y a inventarse la disposición para la vivencia estética y para la producción de grupo como obra de arte. Así, quienes integran los grupos se mueven entre cuerpos conocidos, que son los pensamientos corporales hegemónicos, organizadores y por lo tanto familiares y tranquilizantes y nuevas formas, que nunca son, porque siempre va siendo.
Una secuencia posible.
Inventario que investiga la capacidad de la persona para percibir sensaciones y estados. Toques, texturas, temperaturas y otras. Se lleva la atención a las sensaciones corporales de ese momento y a los diapasones para captarlas. ¿Qué tipo de sensaciones se registran con mayor facilidad? ¿Hacia dónde se orienta la atención naturalmente?
Se investigan matices entre sensaciones de comodidad e incomodidad corporal, en zonas y posturas variadas, para desarrollar el oído sensible a sensaciones y estados de ánimo, que se desarrollan durante la experiencia. Se busca afinar matices y discriminar las sensaciones que se piensan de las sensaciones que se sienten. ¿Qué provoca este registro? ¿Cómo se sale de posturas incómodas? ¿Se modifica la incomodidad en la quietud, en el movimiento? No sólo es posible registrar posturas incómodas, también se pueden registrar incomodidades en las ideas, en los conceptos, en las herramientas de trabajo. Se van produciendo estados tónicos flexibles a través de consignas verbales, ejercicios de tacto y contacto y herramientas corporales varias.
Mediante la práctica se guía a los integrantes del grupo a registrar escenas que provienen del cuerpo, de la incomodidad de las posturas, de la tensión de estar atraídos en varias direcciones, de los desequilibrios que se experimentaron. Un devenir del Corpodrama introduce en la Covisión clínica (supervisión horizontal). Se hace un inventario de escenas conflictivas profesionales, se elige una, se la representa hasta mostrar la captura, y provocar las resonancias escénicas de los integrantes del grupo, que despliegan estilos variados para salir de la captura. Las resonancias son abundantes cuando se ha creado un estado receptivo para captar y pensar en un lenguaje escénico Otros devenires llevan a otro tipo de puesta en escena más teatral, más danzada, más musical. Y luego se buscan las resonancias de la clínica. Los rumbos son muy variados.